blog

“Conocí a la Doctora a través de unos amigos. Ellos habían tenido trillizos con la ayuda de María, y me recomendaban llevar mi embarazo de mellizos en su consulta. Como yo ya había tenido un embarazo y parto anterior sin complicaciones, mi intención era acudir esporádicamente a la consulta de María para asegurar que todo iba bien y que no había nada de qué preocuparse, y así seguir llevando mi embarazo con el equipo de ginecólogos que me trataba desde siempre. Y lo que me encontré en esa primera consulta fue a una persona encantadora, con una experiencia abrumadora y a la que era imposible dejar de acudir asiduamente por la naturalidad de su trato y la profesionalidad de su diagnóstico.

Ella fue la primera en diagnosticarme la placenta previa precoz que padecí en el primer trimestre, y en prever el inminente acortamiento del cuello del útero en la semana 27, colocándome un pesario que salvò a mis mellizos de un nacimiento extremadamente prematuro. De esta forma el final del embarazo se tornò en una situaciòn de amenaza de parto constante, y las visitas a su consulta se convirtieron en un salvavidas. Los días en los que me tocaba revisiòn estaba tranquila porque sabía que si algo no iba bien, ella lo iba a detectar y mis bebés estarían a salvo. Además, acudir a la consulta se convirtió en terapia para mi que, dado el reposo que tenía que guardar, básicamente salía de casa para ir a su consulta, y allí, con la doctora y con Mercedes, me desahogaba y cogía fuerzas para hacer reposo una semana más.

Finalmente Sofía y Nicolás nacieron en la semana 34 + 3 con toda la vitalidad del mundo.

Y este final feliz se lo debo en gran parte a la Doctora de la Calle, por guiarme con su saber durante estos meses y diagnosticar siempre un paso por delante.
Fue para mi un ángel en el camino.

Gracias Doctora!

María”