La ansiedad y los conflictos en el trabajo aumentan las complicaciones fetales
La detección precoz de las complicaciones gestacionales es una prioridad en obstetricia. En nuestro contexto social, esto está ligado a la edad de maternidad. La mayoría de los estudios se centran en factores biológicos y químicos. Sin embargo, el embarazo también está influenciado por factores sociales y psicológicos, que no se han explorado en profundidad.
En el Hospital La Paz, junto al Departamento de psicología y el Departamento de Bioquímica de la universidad Autónoma de Madrid, llevamos a cabo un estudio en 182 gestantes para identificar los factores de riesgo psicosocial y de protección asociados con el desarrollo de complicaciones maternas y fetales. Todas las embarazadas eran mujeres sanas. En ellas medimos los niveles plasmáticos de melatonina y cortisol en el primer trimestre mediante. De la misma manera, las gestantes respondieron al inicio de la gestación varios cuestionarios psicosociales (calendario de afectos positivos y negativos, escala de ansiedad y depresión hospitalaria, escala de preocupaciones por el embarazo, prueba de orientación de vida, escala de resiliencia, escala de satisfacción con la vida y escala de conflictos vida-trabajo).
Fueron seguidos hasta el parto y categorizados como embarazo normal, complicaciones maternas o fetales.
Concluimos que los factores psicológicos influyen en los resultados del embarazo en asociación con las alteraciones de la melatonina y el cortisol.
Los niveles altos de melatonina materna y satisfacción con la vida podrían ser factores protectores potenciales contra el desarrollo de complicaciones maternas durante el embarazo. Los niveles bajos de ansiedad y cortisol y la reducción de los conflictos entre el trabajo y la vida podrían prevenir complicaciones fetales.
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